3 de septiembre de 2011

QUE TINGUIS SORT

Preparar una boda puede ser más fácil de lo que parece. Y si eres una persona fiel a tus principios puedes conseguir evitar los topicazos.
Aunque hay cosas que no podrás evitar. Por ejemplo:

- Puedes no invitar a todo el mundo. No evitarás quedar mal con algunos. 
- Puedes pasar de la música del restaurante y grabar tu propia música. No podrás evitar a Paquito el chocolatero. Y si hay micrófono, tus amigos lo  utilizaran. 
- Puedes ir vestida de blanco roto. No podrás evitar la cola del vestido.
- Puedes besar al novio pero no evitarás que lo desnuden ( eso no me parece del todo mal... ). Y seguro que acabas besándolo subida encima de una silla, con tacones y a lo loco. 
- Puedes ir a la pelu para que te pongan la mar de mona. No evitarás que todo el mundo te diga lo que te quedaría bien.
- Puedes irte de luna de miel un par de días a un balneario, todo pagado cortesía de los amigos. No evitarás que te pregunten dónde te vas de superviaje. ¿ Por qué todo  el mundo espera que te vayas de pulsera a la Rivera Maya o a Bora Bora ? Nosotros aprovechamos cualquier excusa para viajar y no necesitamos que la excusa sea una boda.
- Puedes hacerte cientos de fotos. Alguna saldrá bien. Espero.
- Puedes ir al lavabo, siempre y cuando vayas acompañada.
- Aprenderás que lo de que el alcohol amansa a las fieras es mentira.
- Cuando llega el momento del sí quiero, la vista se te nubla y no eres capaz de ver. El oído se agudiza y oyes tus latidos. La piel se te eriza.
- Puedes entrar en la habitación " suite nupcial " en brazos de tu chico. No evitarás caerte. Y si tu chico no se acuerda, siempre puedes decirle que la entrada fue espectacularmente romántica.
- Puedes tocarle el culo a todos los chicos de la fiesta, buscar pedazos de una foto tuya en cada una de las mesas de los invitados para juntarlas a lo puzzle y darte cuenta de que tú no querías ver esa foto. No evitarás que esos momentos queden grabados ( y documentados ) en el facebook.

Me emocionaron las palabras de Sandra, que una vez más me demostró que siempre puedo contar con ella.   Mi hermana, con su vestido de presentadora de Campanadas de fin de año, y su discurso de mujer casada que te habla de la pasión que se pierde y del amor que se crece.
Me emocionó que Nurit tocara la canción Que tinguis sort con su flauta travesera. Y ver a Grau traer los anillos a ritmo de paso militar.
Me emocionó sentir el ritmo acelerado de mi corazón al ver a Jordi esperándome. A mi padre sujetándome con firmeza, a mi madre emocionada, a mi niño sonriendo...

Si volviera a tener la oportunidad de tener un micrófono entre mis manos daría las gracias:
- A mis padres por apoyarme siempre en todas mis decisiones, incluso cuando no están de acuerdo.
- A mis amigos, porque son capaces de cualquier locura para hacerme feliz.
- A mi niño, porque me hace querer ser mejor.
- A mis hermanas, por contar conmigo cuando se meten en líos.
- A Sandra y Sebas, por creer en mi.

No creo en los principios del matrimonio como tales. Creo en el respeto hacia tu pareja como amigo y amante. Creo en la educación de los hijos en la libertad y la comprensión. Espero poder transmitirle a David esos principios.
El anillo, la fiesta, el pastel... son un símbolo. Son la necesidad de compartir con familiares y amigos tu suerte. La suerte de haber encontrado a alguien que te acepta tal y como eres. A alguien de quien no puedes prescindir.

Nos lo hemos pasado genial y seguro que no olvidaremos este 3 de Septiembre del 2011.







1 comentario:

sandra dijo...

UFFF, me estoy poniendo al día con tu blog, uffffff, super achuchón. Gracias Fani