Con los peques y las mochilas y los sacos de dormir y los potitos y los pañales y los polares y los carritos y las manducas y el calientabiberones y la ropita y los pañales y las tarjetas de crédito, sobre todo, las tarjetas, porque este viaje va a ser carísimo.
Hacer las maletas ha sido ( y cito textualmente ) un infierno !!! Y eso que yo me consideraba una experta en el tema. Ha sido imposible abreviar equipaje. ! Imposible ¡ Parece que nos mudamos de casa y sólo nos vamos tres semanas. Es nuestro primer viaje en avión con el peque.
Nos acompaña la familia Merino ( lo siento Sebas, no me sale poner primero tu apellido ) que siempre nos lía. Decidimos, después de mucho divagar, ir a Islandia. Nos pareció un destino más o menos fácil con los peques.
Supongo que necesitamos demostrarnos a nosotros mismos que aunque somos papás y nuestras vidas han cambiado para siempre, podemos ser dueños de un trocito de nuestro destino y hacer cosas que siempre hemos hecho, como viajar. Lógicamente no soy tan bucólica ni inocente y sé que viajar con peques implica una serie de inconvenientes que no tendríamos si viajáramos solos. Pero nos gusta la aventura, así que allá vamos !!!!
Nos espera una isla llena de parques naturales y volcanes, géiseres y fiordos y con un poco de suerte, ballenas. Hemos alquilado una furgoneta y nuestra intención es recorrer la isla de sur a norte, empezando por la capital, Reykavik.
Nuestro peque no se acordará de esta experiencia, pero seguro que nosotros sí y podremos contarle que de pequeño, estuvo en Islandia y vio ballenas.
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