Durante este mes de febrero hemos apuntado a David a nadar. Lógicamente no va a aprender a nadar. Se pretende que pierda el miedo al agua ( cosa que no estoy segura que haya tenido jamás ), que gane confianza y seguridad en sí mismo, que adquiera un mejor desarrollo motor, que sea fuerte y sobre todo, sobre todo, que se lo pase bien y sea un niño feliz.
El primer día me sorprendió. Pensaba que se asustaría, lloraría o patalearía y muy lejos de todo éso, se lo pasó genial. Sonríe y me busca con la mirada de vez en cuando, investiga con curiosidad a los otros niños del grupo, persigue las pelotas de colores en el agua, chapotea divertido y juega con los cubos de agua y las regadoras . Toda una aventura.
La primera inmersión se asustó ( y continúa haciéndolo en todas ) pero no lloró ni se disgustó. Un besito, unas palabras de ánimo y a por otra!!
Los papás nos pasamos la clase dando ánimos y besitos. Pasamos por debajo de un aro, lo sentamos en el borde de la piscina para hacerle " saltar " al agua, nos sumergimos con él. Es importante no asustarte más que ellos.
Una cosa muy curiosa es que los bebés no cierran los ojos al sumergirse, por eso los papás tampoco debemos hacerlo. ¿ Qué pensará tu bebé si no te ve mirándolo y protegiéndolo ?
Posiblemente, nunca recordará sus primeros chapuceos, pero seguro que nosotros nunca los olvidaremos.
La primera inmersión se asustó ( y continúa haciéndolo en todas ) pero no lloró ni se disgustó. Un besito, unas palabras de ánimo y a por otra!!
Los papás nos pasamos la clase dando ánimos y besitos. Pasamos por debajo de un aro, lo sentamos en el borde de la piscina para hacerle " saltar " al agua, nos sumergimos con él. Es importante no asustarte más que ellos.
Una cosa muy curiosa es que los bebés no cierran los ojos al sumergirse, por eso los papás tampoco debemos hacerlo. ¿ Qué pensará tu bebé si no te ve mirándolo y protegiéndolo ?
Posiblemente, nunca recordará sus primeros chapuceos, pero seguro que nosotros nunca los olvidaremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario